lunes, 1 de noviembre de 2010

De como me convertí en un planeta. (ojo con esto)

Ray Bradbury estaba ahí, me miró y me preguntó qué estaba haciendo yo allí. Lo miré, hice una pausa y sin dejar que me temblara la voz respondí con tono astuto – Yo podría hacerle la misma pregunta, Sr. Bradbury.- Me sentí muy astuto. Ray Bradbury parecía confundido, estaba parado en mi panza, junto a un lunar que tengo cerca del ombligo, del otro lado había un cuete, como los que se usan para ir al espacio. Me miró y se podía ver claramente que estaba cruzado por una profunda emoción, sus ojos veían lejos, cristalinos y ligeramente húmedos. Su voz se quebró al preguntarme – ¿Esto es Marte?- Le respondí que no, que era mi panza. Y entonces se puso furioso - ¡Tonto! – Exclamó Ray Bradbury con profusa indignación – No sabes lo que has hecho, te estás convirtiendo… Oh, diablos! EN UN PLANETA!- Rápidamente me miré la panza y entonces descubrí que lo que decía Bradbury era cierto. Mi barriga en toda su plenitud, se había teñido del mismo tono rojizo con el que el escritor describiera al planeta. Rojo, rojo gastado, erosionado. Aspiré el aire pausadamente, para no marearme. Pero allí estaba, tan claro y tan tangible como cualquier otra cosa. Comprendí el alcance de lo que el me había dicho. Había dejado que los acontecimientos se sucedieran libremente y me estaba convirtiendo en un planeta. Mis pies comenzaron a sentirse más livianos y poco tiempo después me encontré flotando en calma. Giraba lentamente sobre mi propio eje. Me volví hacia Ray Bradbury para pedirle una explicación con la mirada, pero el estaba absorto en sus propias cavilaciones, las cuales no me atreví a interrumpir.
De improviso, un sonido tenue pero notorio cortó el silencio de mis pensamientos. Era como si estuviesen raspando una superficie, pero con suavidad y autocontrol. Y provenía del cohete. Permanecí observando con expectativa hasta que vislumbré una sombra del otro lado de la nave. Estiré el cuello para alcanzar la figura con mi vista y lo conseguí, lo que percibí, me dejó sin aliento, anonadado. Junto a la superficie del vehículo espacial, se encontraba nada menos que el Sr. Miyagui. Si, aquella estrella de inagotable sabiduría karateka no paraba de encerar y pulir el costado del cohete. Me cagué de risa. Pero enseguida me disculpé con Miyagui, porque lo había interrumpido en su tarea. El hizo una profunda reverencia y me preguntó si había algo que el pudiese hacer por mi. Yo no supe que contestar, qué podía pedirle yo al gran Sr. Miyagui. Entonces se me ocurrió que tal vez el podría hacer algo para calmarlo a Ray Bradbury que había quedado bastante desorientado con todo este tema del planeta. Se lo sugerí y el asintió con la cabeza al tiempo que decía – Hai – Entonces fue a buscar al escritor y le explicó que lo que estaba ocurriendo era perfectamente normal y lo invitó a su casa. Si, ahí vi que atrás del cuete estaba la casa de Miyagui y se sentaron los dos en unas reposeras. El maestro de karate fue a buscar champagne y ambos se quedaron bebiendo hasta entrada la noche, charlando de sus experiencias y desventuras y comentando los resultados de la última fecha de la Liga de Campeones.
Yo observé que ninguno de ellos tenía traje de astronauta, ni casco, ni máscara. Y me sentí orgulloso de ser un planeta con atmósfera.

6 comentarios:

Negra dijo...

con atmosfera...
:)

GRUPO UROBORO dijo...

A poooorrrr favooorr, detengan el festival, ya está ya lo encontramos este es el ganador!!!!, Maestro, MAESTRO ESTO ES COMO QUE TENDRIA QUE ESTAR EN LA BIBLIA O ALGO ASI, ESTO LO TENDRIA QUE HABER VISTO MATEO.

"Su voz se quebró al preguntarme – ¿Esto es Marte?- Le respondí que no, que era mi panza", JAAAAAAAAAA INCREIBLE, INCREIBLE.
Bradbury y Miyagui en una misma historia, ESO ES ARTE, PAPÁ

GRUPO UROBORO dijo...

deberia haberle hecho caso a la advertencia del titulo...

"(ojo con esto)"

ya es demasiado tarde....

GRUPO UROBORO dijo...

ES DEMASIADO TARDE....


MAESTRO!!!

Paco dijo...

La atmósfera es fundamental.
Y si, algunos van a aprender a presatarle atención a las advertencias.

GRUPO UROBORO dijo...

Ah, pero yo no puedo creer que volvi a leer esto...y me sigo sorprendiendo